Muchas son las fórmulas y propuestas que se han buscado para tener menos pobreza y mayor distribución de la riqueza en las naciones, algunas propuestas son muy empíricas que suenan más a promesas irrealizables y otras más con un sustento metodológico.

Hoy que estamos en un proceso electoral en México, por lo tanto es  atendible hablar de una propuesta universal que se da en otros país, y que al menos en México en este tiempo no es propuesta de ningún candidato pero considero sería y propia de comentar, se trata de la propuesta teórica de la Renta Básica cómo Derecho y cómo Contrapoder, del político y jurista hispano-argentino, doctor en Derecho y profesor titular de Derecho Constitucional Gerardo Pisarello.

La tesis del autor es la necesidad de implementar una renta básica, es decir la entrega de una suma de dinero de forma periódica, cómo derecho universal y gratuito del ser humano que tenga las mismas características en su valor y protección que los derechos humanos de la vida, educación, salud. Argumenta que la renta básica cómo derecho universal otorgaría al hombre un auténtico contrapoder cómo limite y protección de las intervenciones arbitrarias de los factores reales de poder de una Región o País, en específico de los gobiernos y de todas las representaciones del mercantilismo que existe y que deja al ser humano agobiado, subyugado y privado para el acceso de sus derechos más elementales.

Este derecho debería ser una protección constitucional por el estado, pero superaría los límites y condicionantes que supone la burocracia empoderada propia del poder político que agrede aún en la idea de un paternalismo al ciudadano y que lo ha reducido a nada su poder político.

Está renta básica debería también por supuesto dar poder económico, mejorando el metro cuadrado del ciudadano y de esta forma otorgar  la protección o al menos quitándole vulnerabilidad ante el poder mercantilismo alentado por las leyes del mercado y a su vez de las formas y estilos de gobiernos que mucho tiene que ver con interés de grupo y empresarial que reducen a objeto al ser humano.

Otro elemento de está renta básica es el contrapoder ecológico , aquí significa un replanteamiento a los modelos de explotación propios de la industria ya que se reconocería un derecho de cada ciudadano en particular sobre el medio ambiente, es decir ya no le pertenece al estado o gobierno ni mucho menos a empresas que han adquirido derechos de propiedad históricos sobre la explotación de recursos atraves de medios e instrumentos legales propios de los gobierno, si no significa un derecho real de cada individuo y por consecuencia el derecho a disfrutar de esos gananciales, pretendiendo cambiar la idea de explotación arbitraria e indiscriminada por una conciencia y control de abusos.

Está tesis del profesor titular de Derecho Constitucional Gerardo Pisarello parte de un diagnóstico que hace a partir del momento histórico en Alemania cuando cae el muro de Berlín 1989, en donde se registran gobierno emergidos basados en promesas sociales que pretender resolver los problemas sociales y económicos de forma mágica y declarativa, trayendo por consecuencia decepciones sociales hacia los gobiernos del tercer mundo en específico y en donde existen grandes diferencias sociales y brechas de pobreza muy profundas. En este contexto el autor argumenta que se desarrollan dos complejidad que conviven día a día y que son el poder estatal y el poder del mercado, en esa relación histórica en diversos países se va desarrollando un sin fin de consecuencias sociales en la lucha por los derechos laborales y sociales de las poblaciones, en algunos casos con falsos logros llamados conquistas de derechos pero que muchas veces solo obedecen a conveniencias del mercado y por su puesto de sus miembros.

Se hablo de derechos sociales cómo paradigma joven pero difícil de evaluar en los años ya que el titular de estos derechos se ve absorbido por los entornos en el día a día, ya que sus supuestos derechos ganados ya sean económicos y políticos se ven reducidos a nada ante un mercado que marca los precios, consumos y sobre todo la subyugación de los ingresos de las personas. Es decir, de nada sirve ganar más dinero si los mecanismos para el consumo humano son más agresivos y sobre todo poderosos para reducir a nada el supuesto mejoramiento económico del ciudadano.

En el próximo artículo hablaremos de los demás componentes que debe tener este derecho a la Renta Básica dentro de los que se describirán la forma en cómo debe blindarse está política pública para no ser aprovechada por alguna fuerza política que condicione el apoyo de la población. Término, muchos críticos han observado en la discusión universal la existencia de un afán histórico de tener controles políticos sobre el ciudadano que ha provocado una serie de invenciones y soluciones paternalistas basadas en políticas asistencialistas ocasionando solo más pobreza, hambre e injusticia.