El caso de los hermanos Menéndez, quienes fueron condenados a cadena perpetua por el brutal asesinato de sus padres en 1989, ha vuelto a capturar la atención del público gracias a las nuevas series y documentales.

Netflix acaba de estrenar "Monstruos: la historia deLyle y Erik Menéndez", una serie dramática que narra los eventos que llevaron al parricidio en su lujosa mansión de Beverly Hills, con un elenco liderado por Javier Bardem y Chloë Sevign y en los papeles de José y Kitty Menéndez, mientras que Nicholas Alexander Chavez y Cooper Koch interpretan a Lyle y Erik.

Además, Max ha lanzado el documental “Los hermanos Menéndez: ¿Víctimas o verdugos?”, que explora más a fondo los detalles de este caso mediático, incluyendo los supuestos abusos que los hermanos alegaron sufrir a manos de su padre.

Un crimen que sacudió a Beverly Hills

El 20 de marzo de 1989, los hermanos Lyle y Erik Menéndez mataron a sus padres a tiros en su lujosa mansión. A pesar de que inicialmente se investigaron posibles conexiones con la mafia, la vida extravagante que los hermanos comenzaron a llevar tras la muerte de sus padres despertó sospechas. Erik, en un error fatal, confesó el crimen a su psicólogo, lo que desencadenó su arresto y los infames juicios que captaron la atención de millones en todo el mundo.

Ambas producciones presentan dos perspectivas del caso: el drama de Netflix y el enfoque documental de Max, complementan la historia con detalles que han reabierto el debate sobre los hermanos Menéndez, su culpabilidad y las supuestas nuevas pruebas que podrían cambiar el rumbo de su condena.

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