Ante la severa crisis energética que atraviesa Cuba, el gobierno de México ha extendido una mano amiga, ofreciendo a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) como apoyo técnico para contribuir a la solución de este problema. A través de un comunicado difundido por la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), se anunció que México está listo para colaborar y brindar asistencia en el restablecimiento del suministro eléctrico en la isla.

La crisis eléctrica en Cuba

Desde hace varias semanas, Cuba ha estado enfrentando una serie de apagones que han afectado gravemente a la población.Sin embargo, fue el viernes pasado cuando el problema alcanzó su punto más crítico con la desconexión total del Sistema Eléctrico Nacional (SEN). Esta situación ha causado la suspensión de clases, interrupciones en actividades comerciales y ha dejado a millones de personas sin electricidad,imposibilitando incluso la conservación de alimentos en refrigeración. A esto se suma la preocupación por el huracán Óscar, que amenaza con empeorar la situación.

El apagón fue provocado por una falla en la termoeléctrica ubicada en Matanzas, una de las principales plantas de energía del país. De acuerdo con el gobierno cubano, la falta de mantenimiento y la obsolescencia de la infraestructura eléctrica han contribuido a esta crisis. Actualmente, se ha logrado restablecer el servicio en un 37% del país, mientras que en la capital, La Habana, el 90% de los clientes ya cuenta con electricidad.

La oferta de ayuda de México 

En respuesta a esta emergencia, el canciller mexicano, Juan Ramón de la Fuente, ha estado en comunicación constante con su homólogo cubano, Bruno Rodríguez, intercambiando información sobre la situación energética de la isla. En su mensaje, la SRE ofreció el apoyo técnico de la CFE, considerada una de las principales empresas de energía de la región, para contribuir a la solución de la crisis.

La ayuda de México podría ser clave para estabilizar el sistema eléctrico de Cuba, que ha sido golpeado no solo por fallas técnicas, sino también por la escasez de combustible, producto de las restricciones impuestas por el embargo de Estados Unidos. A pesar de los esfuerzos de las autoridades cubanas, el sistema sigue siendo frágil y vulnerable, lo que ha llevado al país a depender de la ayuda internacional.

El presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, ha destacado el esfuerzo que se está realizando para restaurar el sistema eléctrico, calificando el trabajo de las brigadas técnicas como"admirable". Sin embargo, la situación sigue siendo crítica en varias zonas de la isla, donde muchas familias continúan sin luz, agua o gas, viéndose obligadas a recurrir a métodos tradicionales como cocinar con leña.

México no es el único país que ha ofrecido su apoyo. Según declaraciones del ministro de Energía cubano, Vicente de la O Levy, otros países como Colombia, Venezuela y Rusia también han mostrado su disposición para colaborar en la recuperación del sistema eléctrico de Cuba.

La intervención de la CFE podría ser un paso importante para ayudar a Cuba en su lucha por estabilizar su red eléctrica, especialmente ante los desafíos que la isla enfrenta, no solo a nivel técnico, sino también en términos de acceso a los recursos necesarios para mantener su infraestructura energética.